Oración Acerca de una Bendición de Adviento Tras Otra

La Predicación de San Juan; por Pieter Bruegel the Elder ca. 1566

"Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como    del unigénito  del Padre), lleno de gracia y de verdad.
Juan dio testimonio de él, y clamó diciendo: Este es de quien yo decía: El que viene después de mí, es antes de mí; porque era primero que yo.
Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia." Juan 1:14- 16

"Amado Jesús, puedo entender por qué,  de todos los relatos de tu nacimiento, Juan es el personaje que menos se escoge para pastorelas y obras de teatro navideñas. Después de todo, ¿qué partes actuarían los niños?, ¿qué disfraces lindos usarían? No hay un pesebre en el escenario, no está José ni María, no hay pastores ni ángeles, ni hombres sabios y animales de granja. Pero ciertamente estás TÚ. Tú eres la única estrella en el horizonte dentro de esta escena de la natividad, y ¡cómo brillas!


Jesús, te alabo por haberte hecho "carne" y haber "habitado"  entre  nosotros por el tiempo preciso. Eres igual al Padre, y a la vez distinto al Padre, no consideraste tu gloria como algo a que apegarte o aferrarte egoístamente. Sin en cambio, te vaciaste de ti mismo haciéndote hombre- pero no cualquier hombre, un hombre-siervo, el siervo del Señor... el segundo Adán, nuestro Salvador... mi Salvador.


En tus treinta y tres años de vida encarnada, lograste todo lo necesario para la redención de la gente por quién Tú viviste y moriste... Se magnificado, adorado, elogiado, adorado y amado, Señor Jesús. ¡Cuán maravilloso y misericordioso Salvador eres Tú! ¡Qué Dios, que es poderoso para salvar!




 No puedo cantar el gran himno de adviento que escribió Isaac Watts, "Gozo al Mundo", sin pensar en la narrativa de tu nacimiento de Juan; porque hoy Tú reinas el mundo con tu gracia y con tu verdad - la gracia y la verdad de lo que estás Tú  lleno. Tú estás haciendo a las naciones atestiguar  las maravillas de tu amor... a medida que tu amor recorre de un corazón a otro, y de una nación a otra.


De la abundancia de tu gracia seguimos recibiendo  una bendición tras otra - una bendición encima de otra. La bendición de tu justicia imputada... las bendiciones de tener favor perpetuo con Dios... las  bendiciones de tu intercesión y defensa... las bendiciones de la obra de tu Espíritu en nuestras vidas... las bendiciones de tener nuestra ciudadanía en el cielo... la bendición de saber que la buena obra que has empezado en nosotros, y en el mundo, ¡será completada! ¡Sea enaltecida la Deidad Encarnada! ¡Gozo al mundo y a nosotros en verdad! Amén, así oramos, en tu nombre que es el más glorioso."




Oración traducida al español con permiso de Scotty Smith
Para reproducirla contactar al autor @Scotty Smith en The Gospel Coalition